Es importante permitir la optima ventilación dentro de la fuente, ya que puede calentarse y causar daños catastróficos; la forma más común es cubica rectangular.
Es obvio que al comprar el chasis de la fuente, este no tendrá todos (o ninguno) los orificios que necesitamos, por lo que debemos adaptarlos al diseño de nuestro circuito añadiendo o quitando hoyos. La forma de hacer esto dependerá directamente del material del chasis:
Plástico:
Es más sencillo trabajar con un chasis de plástico, los hoyos pueden hacerse con mototool o con un cautín.
Metal:
Cómo es obvio que un cautín no perfora metal, los hoyos en este tipo de fuente serán más sencillos con un taladro.
Ponerle nombre al chasis es también algo sencillo, para el caso de un chasis plástico se puede utilizar un marcador permanente, mototool o el mismo cautín, y para un chasis metálico se puede utilizar mototool o marcador permanente.
Las salidas se pondrán de acuerdo a las necesidades del dueño de la fuente, puede ser con salidas tipo banana, con cables caimán o muchas más, es importante también cubrir los potenciometros con una salida que luzca bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario